sábado, 29 de mayo de 2010

Otros Mundos XLV

Hoy confrontamos una creación del buen sabio Lord Kahno con otra de su némesis, el malvado profersor Radycoff. La criatura de éste, como la del doctor Frankenstein, no tiene nombre. Propongo «Aznárido Crustazoide», pero se admiten sugerencias. El semivegetal con apliques biónicos recuerda al jedi PloKoon. Tal vez los inventos de Lord Kahno se exportaron a su galaxia tan lejana.

094 096

94. Semivegetal biónico.
Los habitantes de Sierra, en la Nube Pequeña de Magallanes, carecían del sentido de la vista y del don de la palabra. Lord Kahno inventó para ellos unos apliques que les permiten ver y hablar, haciéndoles más útiles y felices.

96. Otro experimento de Radycoff.
Después del fracaso con el experimento de su criado, Radycoff se entusiasmó con los trasplantes. Aquí no sabemos si redujo la cabeza del humanoide o si acreció el cuerpo del insectoide.

PloKoon

La imagen de la capitular está tomada de aquí.

sábado, 22 de mayo de 2010

La prueba del camello (Actualizado)

La idea de que los relatos del Antiguo Testamento reúnen leyendas, cuentos y poemas de índole fundamentalmente mítica y fantástica puede parecer evidente. No obstante, a pesar de que la filología ha hecho interpretaciones en ese sentido desde hace mucho, la arqueología ha estado a menudo manipulada por intereses religiosos y nacionalistas, que deberían ser ajenos a toda investigación científica. Afortunadamente, en los últimos años parecen haberse superado esas trabas y tenemos obras como The Bible Unearthed, de I. Finkelstein y N. A. Silberman, donde se recopila, para el lector no especialista, el estado actual de las investigaciones sobre la cuestión. Las pruebas arqueológicas datan la creación del texto, sobre materiales anteriores, a finales del s. VII a.C. El fin político de esta recopilación hay que buscarlo en las ambiciones nacionalistas y expansionistas del reinado de Josías.

Moisés sacando agua de la piedra, Gioachino Asserto
Moisés sacando agua de una piedra de un golpe de bastón (Éxodo 17, 6). Un camello espera pacientemente su turno en el ángulo superior derecho de la imagen. Óleo de Assereto Giochino, que se conserva en el Museo del Prado, Madrid

De entre el gran número de pruebas e indicios que se evocan en la obra de Finkelstein, queremos fijarnos hoy aquí en el relativo a los camellos. En los relatos sobre los patriarcas se mencionan camellos, mientras que en la época en la que se supone la acción no se había todavía domesticado en la región. Evidentemente, los creadores de la narración proyectaban la vida que ellos conocían en relatos de acciones supuestamente pretéritas. En particular, en la historia de José, se mencionan caravanas que llevaban «goma arábiga, bálsamo y mirra», lo que refleja una realidad de los ss.VIII a VII a. C, cuando, bajo la dominación asiria, pudo desarrollarse tal comercio.

Borges y María Kodama en Egipto
¡Oh, tiempo, tus pirámides!

Curiosamente, Borges había considerado la mención u omisión de camellos como criterio de la autenticidad de un texto, en su caso, del Corán. Su punto de vista es estético, no científico como el de Finkelstein, pero no deja de resultar una coincidencia llamativa; incluso precisa que un nacionalista sí hubiera incluido camellos en su redacción:
Gibbon observa que en el libro árabe por excelencia, en el Alcorán, no hay camellos; yo creo que si hubiera alguna duda sobre la autenticidad del Alcorán bastaría esta ausencia de camellos para probar que es árabe. Fue escrito por Mahoma, y Mahoma, como árabe no tenía porqué saber que los camellos eran especialmente árabes; eran para él parte de la realidad, no tenía por qué distinguirlos; en cambio, un falsario, un turista, un nacionalista árabe, lo primero que hubiera hecho es prodigar camellos, caravanas de camellos en cada página; pero Mahoma, como árabe, estaba tranquilo: sabía que podía ser árabe sin camellos. (de «El escritor argentino y la tradición», en Discusión, 1932).
Si la observación de Finkelstein nos da un indicio cronológico, la de Borges, aplicada a la Biblia, nos lo daría social: no fueron los nómadas quienes escribieron esos relatos, sino cortesanos de un rey nacionalista.


Actualización del 23 de mayo a las 17h00:

En respuesta a los comentarios, en particular a las objeciones de RnB (gracias) precisamos algunos de los puntos del post:

El Corán sí menciona a los camellos, por ejemplo en la sura 88, versículo 18: «¿Acaso no reparan en el camello, cómo ha sido creado?». Una búsqueda en una edición electrónica de este texto sagrado arroja 18 referencias a los camellos.
Esto plantea un problema ¿se equivoca Gibbon o se equivoca Borges citando a Gibbon o este miserable predicador citando a Borges? Esta última posibilidad podemos descartarla acudiendo al texto de Borges al que hacemos referencia (pueden encontrarlo aquí).
Gibbon, por su parte, habla de los orígenes del islam, de su profeta, del Corán y de los camellos en el capítulo L de su Decadencia y caída del Imperio Romano. En todo ese capítulo no encontramos tal idea, al contrario: dice que, en su ignorancia de árabe, ha compulsado ediciones inglesas, latinas y francesas de ese libro santo, por lo que parece improbable el error.
Borges era un gran conocedor de Gibbon ¿cómo podría haberse equivocado? El ensayo de Borges se critica a los autores argentinistas que se exceden al añadir color local, quizá Borges se inventó la cita para apoyar su argumentación. El comentario de Guely of Sweden, gran lector de Borges, confirma esta posibilidad (muchas gracias por intervenir).
Una cita de Gibbon pudo sugerir al autor argentino la superchería: en la nota 16 del capítulo mencionado, el historiador habla de los gustos gastronómicos del Profeta y dice: «el camello ni siquiera es mencionado». Gibbon no habla aquí del Corán, sino que cita la Vie de Mahomet, de Garnier. Ya dijimos que el criterio de Borges era estético, no científico.

En cuanto a la objeción relativa a la domesticación del camello, cito literalmente mi fuente, es decir, La Biblia desenterrada (traduzco de la versión francesa, ya que no dispongo de la original):

La historia de los patriarcas está llena de camellos; se cuentan por manadas. Cuando sus hermanos venden a José como esclavo (Gn 37, 25) las mercancías de la caravana son transportadas por camellos. Pero la arqueología revela que el dromedario no fue domesticado antes de finales del II milenio y que no empieza a usarse de manera general como bestia de carga en Cercano Oriente hasta mucho más tarde del año 1000 a.C. La historia de José nos da, a demás, otros detalles reveladores: la caravana de camellos en cuestión transporta «goma arábiga, bálsamo y laúdano». Esta descripción corresponde, de manera evidente, al comercio de estos mismos productos, que los mercadees árabes, bajo la vigilancia del Imperio Asirio, emprenden en los siglos VIII y VII a.C.
Por otra parte, las excavaciones del yacimiento de Tell Jenmeh, en la planicie litoral del sur de Israel —que era un gran almacén situado en la ruta principal de las caravanas que unían Arabia con el Mediterráneo— revelan un aumento espectacular de huesos de camello durante el curso del s. VII a.C. La mayor parte de estas osamentas proceden de animales adultos, que servían como animales de carga y que no eran de origen local, ya que, en caso contrario, se hubieran encontrado también individuos jóvenes. Fuentes sirias mencionan, precisamente en la misma época, el empleo regular del camello en caravanas mercantes. Por lo tanto, sólo a partir de esta época el camello formará «parte del paisaje» y será posible integrarlo en los detalles de un relato literario.

domingo, 16 de mayo de 2010

No es fácil ser verde

Para terminar con las celebraciones proponemos un fragmento de una grabación, donde vemos a Henson impartiendo unos talleres de marionetas, y otra en la que Big Bird interpreta la canción, que originalmente cantaba la rana Kermit, «No es fácil ser verde», en el Jim Henson's Memorial. El aniversario no es más que una excusa: siempre es buen momento para volver a ver Fraggle Rock, Dark Cristal, o tantas otras magníficas creaciones. Gracias, Jim, por todo lo que nos has dado.




Sherlock Hemlock

Hoy se cumplen 20 años de la muerte de Jim Henson, uno de los artistas mayores del siglo XX. Él y su equipo crearon gran cantidad de personajes interesantes, entre los cuales se encuentra Sherlock Hemlock, la parodia de Holmes en Sesame Street.

sábado, 15 de mayo de 2010

Cuentos, tamaños y galletas

Tres vídeos más del Barrio Sésamo más clásico. En ellos vemos al reportero más dicharachero de la emisión, la rana Kermit (Gustavo/ René) cubrir la llegada del Príncipe a la torre de Rapunzel, a Grover waiter (Coco camarero/ Archibaldo mesero) y, por último, Ernie y Bert (Epi y Blas/ Enrique y Beto) nos enseñan que no debemos comer galletas en la cama, si no queremos que las migas nos piquen.








P.D.: El pasado día 11 nos enteramos a través de Pildoras Crumelus de la muerte de otro de los grandes artistas del s. XX, Frank Frazetta. Si no tenemos tiempo para dedicarle en el blog el homenaje que se merece, no por ello lo sentimos menos. Nuestra cultura visual le debe mucho, puesto que sentó las bases iconográficas de personajes tan importantes como Conan el Bárbaro y el tío Creepy. Sus mujeres, todo lujuria, sus guerreros, todo músculo y sus salvajes neanderthaloides continuarán encantando nuestros sueños.

jueves, 13 de mayo de 2010

Cantar y contar

Contar y el abecedario son elementos fundamentales y de los más evidentemente pedagógicos de Barrio Sésamo. La música también ocupa un lugar fundamental y es un aspecto muy cuidado en toda producción jimhensoniana. Muy a menudo, las marionetas que interpretan música pueden realizar la digitación correcta de los instrumentos; no es el caso de los que mostramos aquí, así que mencionaremos el ejemplo del perro Rowlf (Rodolfo), pianista del Muppet Show. Les ofrecemos dos ejemplos que parodian respectivamente el rock y el pop, siguiendo los estilos de Bruce Springsteen y de los Beatles: «Nacido para sumar» y «Letra 'B'».



No dejen de fijarse en el comportamiento de los policías, ya que es un aspecto sobre el que volveremos.
album-Sesame-Street-Born-to-Add
Esta canción dio título a un álbum



Otro asunto pedagógico sobre el que se volvía a menudo era la tolerancia, como en este «Suave y azul (y naranja)». Hoy, los antagonistas de la asignatura educación para la ciudadanía, opinarían que era politizar el asunto. En esta ocasión dejamos el pop-rock para pasar a un estilo más clásico, de bastón y canotier:


lunes, 10 de mayo de 2010

Pan de Molde ¡Esta es su vida!

Los sketches de Barrio sésamo, a pesar de no tener las ambiciones vanguardistas del arte contemporáneo de manual, a veces contienen una subversión de los códigos que ya quisieran muchos artistas que decoran nuestros museos. Un excelente ejemplo es esta pequeña obra maestra, en la que Loaf of Bread (Pan de Molde) es el invitado de Guy Smile (Pepe Sonrisas) en el programa ¡Esta es su vida! El emocionado pan se reencuentra con todos aquellos que han sido importantes para él a lo largo de su existencia.


sábado, 8 de mayo de 2010

20 Years Missing You

El 16 de mayo de 1990 nos dejó Jim Henson, uno de los mayores artistas del siglo XX. En la semana que queda hasta el aniversario vamos a dedicar el blog a su memoria. Lo haremos recordando algunos de los mejores sketches de Sesame Street (Barrio Sésamo o Plaza Sésamo para los hispanohablantes) seleccionados con criterio rigurosamente personal y nostálgico:
  • Pan de molde ¡Esta es su vida!
  • Suave y azul
  • Ernie (Epi/Enrique) come galletas en la cama
  • Noticias del Príncipe y Rapunzel
  • Letra B
  • Gromit (Coco/Archibaldo) sirve una hamburguesa grande


Uno de los anuncios televisivos de los comienzos de Jim.
Subido por batman1971


También quisiéramos hablar de las magníficas Cristal Oscuro de la que se prepara una secuela actualmenteo Laberinto, sin olvidar esa obra maestra, con guiones de una inteligencia pocas veces vista en la televisión, que fue Fraggel Rock. No nos gustaría olvidar El cuenta cuentos, The Muppet Show y tantos otros de sus trabajos. No obstante, no tendremos tiempo para ocuparnos de todo ello como se merece, confiamos que otros en la blogosfera contribuyan al homenaje.




A aquellos que quieran unirse a la celebración, les proponemos una imagen conmemorativa para poner en sus blogs. Si prefieren celebrarlo en la intimidad, pueden usar como fondo de escritorio en sus ordenadores, este tan bonito de aquí.

20Yearsp

Lamentablemente, a causa de la falta de tiempo que padezco, no he podido subtitular los vídeos. Tampoco habrá mucho análisis ni investigación, como nos gusta hacer aquí, de manera que nos limitaremos a disfrutar de las imágenes que nos dejaron él y sus colaboradores, como Frank Oz, el ilustrador Brian Froud o ¿quién escribiría esas músicas geniales? supongo que habría un estupendo equipo detrás (y debajo de) las marionetas.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Campaña viral contra Hipatia

Hace unos meses circulaba un correo electrónico en relación con Hipatia de Alejandría y la película Ágora. Las atrocidades cometidas por los cristianos durante siglos han sido silenciadas por razones obvias; es lamentable que hoy en día se siga sin poder hablar sobre el asunto sin despertar la ira de algunos. Cuando recibí el mensaje no había visto la película, que tardó varios meses en estrenarse por estas latitudes. No obstante, y sin ánimo de defender la película, sino de precisar los errores que componían el texto, di una respuesta, punto por punto. La reproduzco aquí con leves correcciones:

Rachel Weisz
Rachel Weisz como Hipatia en la película


«Hipatia no fue asesinada a los 38 años, sino que murió en el año 415 y tenía 61.»
Como se dice en el texto mismo del correo viral más adelante, los datos que tenemos de Hipatia son muy limitados, no se conoce la fecha de su nacimiento con exactitud y se estima entre el 355 y el 370, dejando pues una horquilla, insisto, sobre estimaciones, de 15 años. Amenábar, al presentar una Hipatia joven y bella, continúa toda una tradición, una iconografía establecida que podemos ver en las obras de artistas como Rafael (en su cuadro La escuela de Atenas) Charles William Mitchell, Julia Margaret Cameron y, en suma, todos aquellos que la han representado gráficamente a lo largo de la historia. Sin duda estos artistas muestran un aspecto idealizado del personaje y quizá inexacto históricamente, pero que se basa en los testimonios contemporáneos que alababan unánimemente su belleza y, desde luego, no es un invento de Amenábar. Por otra parte, que la filósofa tuviera 15 años más o menos no hace su asesinato más o menos atroz.





«No fue famosa por sus dotes de astronomía por más que en la película le atribuyan investigaciones que le adelantan a Kepler más de mil años; sino porque era una «divina filósofa platónica»
Fue, efectivamente, filósofa neoplatónica, pero su obra más importante para la posteridad fue en astronomía y matemáticas:
La mayor parte del saber de la época helenística se perdió, filtrado por los monasterios; a pesar de los intrincados mecanismos de relojería y astronomía que nos descubre la arqueología (como el Mecanismo de Anticitera, por citar el más espectacular) sólo podemos especular sobre el contenido del cerca de millón de volúmenes que debió contener la gran Biblioteca de Alejandría en su apogeo. A nosotros la teoría del desplazamiento de los planetas nos llega del Kepler, que vivió en el s. XVII ¿qué tiene que ver entonces esto con Hipatia? Aunque muchas de sus obras se perdieron ¿sería una especulación muy arriesgada decir que trató el asunto? ¿los mecanismos de observación tenían la precisión necesaria para establecer tal teoría entonces? ¿en qué se basa director de la película? Veamos las obras que sí que sabemos que se deben a Hipatia:


Hypatia por JM Cameron 1867
Representación fotográfica de la filósofa por Julia Margaret Cameron, 1867
Hipatia escribió libros sobre geometría, álgebra y astronomía: «Tablas astronómicas» (útil que trata precisamente sobre el desplazamiento de los astros) un manual sobre la construcción de astrolabios que introducía mejoras sobre los modelos conocidos entonces (precisamente, un aparato de observación astronómica) inventó un hidrómetro y, su obra más importante, «De las cónicas». En esta obra utiliza procedimientos de álgebra y trigonometría que tardarían siglos en ser superados. Las secciones de los conos, entre las que se encuentran las elipses, fueron consideradas sin importancia durante siglos (en comparación con formas como la circunferencia, considerada «perfecta») hasta que Kepler las utilizó para explicar el movimiento de los planetas. Es decir, si no nos consta que Hipatia descubriera que la órbita de los planetas es elíptica, sí que sabemos que estableció las bases matemáticas para poder concebir tal idea y que trabajó en los medios técnicos de observación de los astros.

Desgraciadamente, san Agustín rebate en sus sermones el heliocentrismo, creando una tradición (continuada por Cosmas y muchos otros) de manera que la aplicación de esas bases matemáticas no fue posible hasta que Copérnico trajo de nuevo la idea heliocéntrica.

«Hipatia fue vírgen, pero no "para ser igual que un hombre y poder ejercer una profesión con plena dedicación". Castidad y virginidad no es lo mismo que feminismo. Lo en coherencia (sic) con su ejercicio de la filosofía Sofronise, es decir el dominio de uno mismo a través de las virtudes, entendidas como el control de instintos y pasiones.»
El feminismo ha reivindicado a menudo a Hipatia como predecesora, pero no por su ascetismo (¿desde cuándo el feminismo predica la castidad?) sino por tener un papel predominante en el saber y la sociedad de su tiempo, en el que las mujeres eran consideradas habitualmente como bienes semovientes de sus padres o maridos; en ese sentido, se puede interpretar la castidad como independencia de los hombres.

Cirilo de Alejandría Sami Samir
A algunos parece haberles ofendido la belleza de Hipatia, pero el que sale mucho más guapetón que «en la realidad» es san Cirilo, interpretado por Sami Samir

«Hipatia nunca fue directora de la Biblioteca de Alejandría, ni su destrucción se debió a los cristianos. Dicha biblioteca fue quemada muchas veces. La primera Julio César. En el 273 fue saqueada por Aureliano y Diocleciano remató la faena en el 293»
Existe una tradición que hace a su padre, Teón de Alejandría, célebre matemático y astrónomo, conservador de la Biblioteca de Alejandría. Teón trabajó en la Biblioteca del Serapeo (también en Alejandría) a menudo confundida con la Gran Biblioteca (o Biblioteca del museo) que había ardido hacía siglos. La Biblioteca del Serapeo era entonces el centro del saber en la ciudad y de todo el mundo Helenístico. Lo más probable es que Hipatia enseñara en su propia casa.

«En tiempos de Trajano los judíos destruyeron el templo de Sarpeo (sic) y en el año 391 fueron los cristianos quienes acabaron de derruirlo para derribar la columna de Diocleciano, símbolo de la persecución cristiana. Pero lo que quedaba de la Biblioteca siguió en pie.»
A finales del siglo IV el Serapeum de Alejandría estaba en su máximo esplendor; su biblioteca era la más importante del mundo y su tesoro estaba lleno de riquezas. El patriaca Teófilo, amparándose en edictos promulgados por Teodosio I para reprimir el paganismo, atacó y destruyó diversos templos, preferentemente los más ricos. El Serapeo fue uno de ellos, derruido y quemado en 391 ó 389, según las fuentes. Pese a diversas teorías y leyendas alentadas durante siglos por autores cristianos, ningún historiador actual duda de ello, pues lo prueban las fuentes y la arqueología de manera meridiana.
Empezaban malos tiempos para las bibliotecas: Constantino censó 28 bibliotecas en Roma, Amiano se lamenta algunos años después (378) de que «Las bibliotecas son como tumbas, siempre cerradas»; en 529 Justiniano decretó que los libros anticristianos debían ser quemados; más edictos mandando quemar bibliotecas y templos paganos se suceden desde Constancio. Heyne anota en Zósimo que bajo Joviano:
«A demás de los montones de manuscritos destruidos públicamente en el Este [del Imperio] hombres de letras quemaron sus propias bibliotecas para evitar que algún volumen pudiera exponerles a la malicia de los delatores y al rigor de la pena prevista por la ley. [se equiparaba al delito de traición y de lesa majestad por la Lex maiestas]». Estas prácticas se consideraban por los cristianos como aplicación directa de las enseñanzas de la Biblia, en particular de Hechos 19, 19, cuando Pablo instiga a la quema de los libros de «magia» de Éfeso. No debemos, pues, extrañarnos cuando san Agustín defiende la coacción como método de conversión y cuando san Ambrosio reclama a los emperadores la destrucción de los cultos paganos.

Pablo en Éfeso
Pablo quemando los libros paganos, según Hechos de los apóstoles 19, 19, en una tabla de Maerten de Vos que se conserva en el Museo de Bellas artes de Bruselas.
La columna a la que alude el mensaje se ha conocido por diversos nombres, según el origen que la atribuían distintas leyendas; de Pompeyo, de Diocleciano, etc. hasta que la arqueología aclaró el asunto. La confusión en la que se mete el autor del mensaje, mezclando elementos de estas leyendas contradictorios entre sí, es curiosa: por un lado la identifica con la columna de Serapis, que dominaba el templo: seguramente porque el fuste de la actual columna es el de aquella, reutilizada junto con otros restos de monumentos anteriores. Pero, por otra parte, considera que la columna del Serapeo ya era la de Diocleciano ¿cómo habrían reutilizado el material antes de destruir el templo y derribado su columna? y, ante todo ¿cómo es que la columna llamada de «Diocleciano» siga hoy en pie? ¿La respetaron los cristianos? El autor del texto parece ignorar la buena salud actual del monumento.
La Wikipedia recoge una exposición concisa de la historia de esta columna.
«El paganismo continuó existiendo en Alejandría hasta que llegaron los árabes»
Tradicionalmente se considera la muerte de Hipatia el fin del saber clásico (otros, hablan de la mencionada destrucción de la biblioteca del Serapeo). Esto tiene un valor simbólico (de la misma manera que la llegada de Colón a América se considera el principio de la Edad Moderna y fin de la Edad Media) ya que, como acabamos de ver, esa guerra tenía muchos frentes y los libros ardían en todos los rincones del Imperio. Los monjes serían en los siglos venideros los guardianes del saber. Evidentemente, quedaban paganos en Alejandría tras la muerte de Hipatia: hasta entonces el cristianismo se extendía por las masas iletradas urbanas. Lo que ocurre en esta época es que, apoyándose en la plebe cristianizada, el clero comienza a establecerse como nueva élite de poder desplazando, a menudo con violencia como en los casos que nos ocupan, a la aristocracia culta pagana, que pronto desaparecería. El paganismo de las zonas rurales continuó hasta bien entrada la edad media, tanto en occidente como en oriente.
El origen de la idea de que el asesinato de Hipata representa el fin del paganismo no procede de Amenábar ni de ningún «librepensador», sino de Juan, obispo de de Nikiu del s. VII, quien opinaba que Hipatia «lo tuvo bien merecido por maga y bruja»: la crónica de este obispo nos dice que, tras la inmolación de la filósofa : «Todo el mundo rodeó al patriarca Cirilo y le aclamaron como “el nuevo Teófilo”, ya que él había acabado con los últimos restos de idolatría de la ciudad» (la alusión a Teófilo se refiere a la destrucción por éste de la biblioteca del Serapeo).

«El califa de Bagdad dijo: "Si en la Biblioteca se dicen cosas que no están en el Corán, son falsas: hay que quemarla; si todo lo que contiene está en el Corán, no hace falta: hay que quemarla"»
Esta leyenda, que atribuye a Omar la destrucción de la biblioteca, aunque se identifica como espuria por los historiadores desde hace mucho, tiene todavía cierta difusión popular; a los redactores del mensaje no parece importarles que entre en contradicción con otros de los argumentos que usan. Olvida el hecho de que los árabes se afanaban entonces en recuperar el saber clásico y, todavía más importante ¡Qué nada quedaba de la biblioteca en tiempos de los árabes! Esta fábula no fue difundida en occidente hasta el s. XVII por el clérigo protestante Edward Pococke y había sido inventada por el obispo monofisita de origen judío Abulfaragius, en el s. XIII. Para conocer las circunstancias y detalles de esta invención, así como de otras leyendas y versiones, siempre orientadas a disculpar a los cristianos, la obra más completa es La Biblioteca de Alejandría, de Pablo de Jevenois.

Columna de Pompeyo
La columna comúnmente conocida como de Pompeyo, cuyo fuste es el de la columna de Serapis, en una foto de obrien26382. A la derecha, la misma en un grabado del s. XIX tomado de aquí

«La película se inclina por hacer desaparecer el platonismo con la muerte de Hipatia, ocultando así su florecimiento posterior gracias a los cristianos, uno de cuyos más elevados exponentes fue San Agustín, contemporáneo de Hipatia.»
Los cristianos adoptaron ciertos diálogos de Platón. No sólo eso, el cristianismo mismo es producto de la filosofía griega y las ideas monoteístas de neoplatónicos como Plotino en contacto con los mesianismos procedentes de la Galilea helenizada; conceptos como el Verbo o la Trinidad son inconcebibles sin la influencia de la filosofía helenística, a través del gnosticismo. No obstante, la sesgada transmisión de la cultura griega que efectuaron los monasterios nos privaron de los filósofos más interesantes y que más hubieran podido hacer avanzar a la humanidad en lo material y en lo moral, como Leucipo, Demócrito, Hiparco, Diógenes, Epicuro y un largo etcétera. Todos aquellos que proponían vivir la vida, en lugar de fantasear con otros mundos sobrenaturales, todos aquellos que veían la realidad como algo material, no fueron dignos de interés o se consideraron peligrosos y a penas conservamos algunos fragmentos de sus obras.
En suma, este mensaje parece quejarse de que supuestas imprecisiones en la película exageran la responsabilidad del cristianismo en la pérdida del saber clásico. La respuesta global es que esa responsabilidad es imposible de exagerar. Es, en cambio, difícil de dar una imagen global y coherente de la historia de esa pérdida en un solo largometraje. Espero que las posibles inexactitudes históricas de la película, si las hay, procedan de esa dificultad y no de una voluntad de tergiversación, ya que, tras tantos siglos de manipulación, lo que se necesita es, precisamente, una divulgación seria y bien documentada de estos y otros eventos de la latinidad tardía y alta Edad Media.

Hasta aquí la respuesta al mensaje, pero quisiera añadir otro punto, que también ha aparecido mencionado en diferentes lugares. Algunos han considerado un anacronismo la aparición de la Loba romana en una de las escenas con Rómulo y Remo bajo ella, puesto que en la actual Lupa Capitolina sabemos que los dos niños fueron añadidos en el renacimiento y son obra de Antonio del Pollaiolo. A esto podríamos añadir que la loba misma, como se ha descubierto recientemente, es una estatua medieval. Esta objeción sería aplicable a la representación en una película de la estatua que ornaba el Capitolio en la antigüedad, pero solo relativamente, ya que, aunque no conservemos la original, el símbolo de la loba amamantando los gemelos está muy documentado y el monumento podría ser recreado para una película reproduciendo esa iconografía tan conocida (de hecho, la adición de del Pollaiolo pretendía ser una «reconstrucción»). Pero obviamente no se trata de la estatua del Capitolio, puesto que estamos en Alejandría ¿Qué tiene que ver ése objeto artístico particular con la loba que vemos en Ágora? ¿Qué hay de extraño en que ese símbolo romano se represente en los centros de poder del Imperio?

Lupercal Monedas Altar de Venus y Marte
La imagen de la Loba con Rómulo y Remo es muy común en numismática; arriba, una moneda del s. IV d.C. (fuente) abajo otra del III (fuente). A la derecha, relieve del altar de Venus y Marte conservado en el Museo Nacional de Roma que data del s. I d.C. Tomado de Wikipedia

Tras haber visto la película, confirmamos la idea de que la especulación sobre la posibilidad de que Hipatia pensara en el movimiento elíptico de los planetas es un imagen poética, pero verosímil, para evocar los conocimientos antiguos perdidos: recordemos que no llega siquiera a transmitir la teoría, la matan en cuanto se le ocurre. Por otra parte, entendemos todavía menos la indignación de los cristianos, ya que su papel, lejos de exagerarse, aparece dulcificado, en particular en las escenas de la destrucción del Serapeo y en el asesinato de la protagonista. En la primera, no vemos al obispo Teófilo azuzando a las masas ni tomar parte en la masacre, que fue mucho más radical que en la película, puesto que no dejaron piedra sobre piedra. Para esta escena, en la que vemos la lectura del Edicto de Teodosio y a los cristianos dejando escapar a los paganos con algunos de sus libros, el director sigue al pie de la letra The Arab conquest of Egypt and the last thirty years of the Roman dominion, 1902 (click en el título para descargar el pdf) de A. Butler, que la imagina así por que le cuesta creer que los cristianos se comportaran tan salvajemente, aunque tenga que ignorar para ello los documentos y las excavaciones arqueológicas de Botti que, seis años antes, había desenterrado bajo las ruinas del Serapeo los cadáveres brutalmente asesinados de sus ocupantes en gran cantidad, con evidencias de destrucción e incendio (cf. de Jevenois, 2009 y Botti, 1896).

La escena de la muerte de la filósofa es mucho menos atroz que la que nos transmiten las fuentes; en ella, Amenabar se subordina a la historia de amor que ha introducido en la trama y a la elegancia del conjunto, que habría sido rota con tal efusión de violencia. Recordemos la descripción de Gibbon:
En un día fatal, en la sagrada estación de Cuaresma, Hipatia fue sacada de su carruaje, desnudada, arrastrada a la iglesia, e inhumanamente masacrada por Pedro el Lector y una tropa de fanáticos salvajes e inmiseriecordes; la piel le fue arrancada de los huesos con afiladas conchas de ostra, y sus extremidades temblorosas fueron arrojadas a las llamas. (Decline and Fall, XLVII)
A parte de estos puntos, explicables por motivos artísticos, la película está cuidadosamente documentada y ambientada, pese a los anatemas del mensaje de marras. La posición de este blog respecto al cristianismo es considerarlo una interesante ficción, desde el punto de vista teórico, y, desde el histórico, una lacra que en el pasado hizo sufrir a la humanidad. Reacciones como las que ha provocado esta honesta película, que se distingue precisamente por una primorosa representación de la Alejandría de la época, nos hacen recordar que, lamentablemente, todavía quedan adeptos de las doctrinas medievales.